• julio 5, 2025

El pulmón verde de Santa Cruz es ahora el centro de un debate crucial

La reciente propuesta de incluir el “Parque Ecológico Metropolitano Piraí” o Cordón Ecológico dentro de la zona urbana de Santa Cruz de la Sierra ha generado inquietud y debate. Diversos actores han expresado sus opiniones sobre esta cuestión, destacando la necesidad de un enfoque técnico y precauciones ante los riesgos asociados a las crecidas del río Piraí.

“Zona Intocable”

El director del Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (Searpi), Luis Aguilera, afirmó  categóricamente que esta área es “intocable”. Según él, la función del Searpi es evitar que el río Piraí ingrese a la ciudad, recordando los eventos catastróficos ocurridos en 1983 cuando Santa Cruz vivió una de las peores tragedias de su historia: el desborde del río Piraí. Este turbión destruyó todo a su paso y dejó a miles de familias sin hogar. La magnitud de la devastación fue inmensa.

Para enfrentar esta crisis, el municipio tomó medidas audaces. Tres mil familias damnificadas fueron reubicadas en la zona este de la capital cruceña. Así nació la ciudadela Andrés Ibáñez, más conocida como el Plan 3000. Los primeros habitantes se asentaron en lo que hoy se conoce como el obelisco.

Hay una fragilidad en el cordón, una inseguridad ciudadana, el bosque está avasallado por vivientes. Los 100 metros que comprende la llanura de inundación es intocable”, indica Aguilera

Asimismo, comunicó que pidieron a la Alcaldía municipal trabajar proyectos integrales para evitar problemas a futuro, en los cuales se socialice con las instituciones preocupadas por el medio ambiente.

“Debemos trabajar todos, imitando modelos exitosos de otros países para fortalecer y dar protección a la población. El cordón ecológico no es solo donde están las Cabañas; son 1.500 hectáreas de terreno”, dijo Aguilera, resaltando que siempre se ha luchado y defendido el cordón.

Asegura que el Cordón Ecológico actualmente se encuentra desprotegido, ya que existen edificaciones de vivienda y deforestación en gran magnitud, existiendo un total irrespeto a las normas y leyes ambientales, por lo que instó a la Alcaldía municipal trabajar en proyectos integrales para evitar problemas a futuro.

Resalta la importancia de que el Cordón Ecológico desempeña un papel crucial en la prevención de inundaciones. A pesar de las presiones para urbanizarlo, su conservación es fundamental. No debe ser urbanizado porque tiene una extensión de 100 metros, conocida como la llanura de inundación, cumple una función esencial.

No se trata solo de frenar hidráulicamente y reencauzar el río. También alberga una flora diversa y un bosque protector. Este bosque no solo resguarda contra inundaciones, sino también protege a Santa Cruz de los vientos y la erosión de la arena.

Por su parte, el gobernador en ejercicio, Mario Aguilera, resaltó que como técnico es consciente de la importancia que cumple el Cordón Ecológico para la mitigación de vientos y afectación a la ciudad de Santa Cruz, por lo que dejó en claro que será respetuoso de las normativas nacionales, departamentales y municipales que lo protegen

El Cordón Ecológico de Santa Cruz de la Sierra, un pulmón verde vital para la ciudad, se encuentra en el centro de un debate crucial. Su inclusión en la mancha urbana ha generado preocupación y opiniones encontradas. A continuación los argumentos y desafíos que rodean este espacio natural.

Funciones Esenciales del Cordón Ecológico

El Cordón Ecológico cumple diversas funciones cruciales:

  • Regulación de la Calidad del Aire: Contribuye a mantener un ambiente saludable al filtrar contaminantes y proporcionar oxígeno.
  • Mejora de la Calidad de Vida: Ofrece espacios para el esparcimiento, el ejercicio y la conexión con la naturaleza.
  • Mitigación de Temperaturas y Vientos: Actúa como un amortiguador climático, reduciendo extremos de calor y vientos fuertes.
  • Protección contra Riadas del Río Piraí: Históricamente, ha evitado inundaciones catastróficas en la ciudad.
  • Advertencias de Riesgo

Existe una deficiencia en la compatibilidad de las normas aplicables al área. Por lo tanto, se requiere un estudio más profundo para comprender mejor la situación. El proyecto técnico definitivo del Parque Metropolitano debe hacerse público. El Cordón Ecológico no estará asegurado hasta que el Gobierno municipal lo revele.

El Parque Metropolitano del Río Piraí, conocido también como el “cordón ecológico” por los cruceños, ha sido objeto de debate y confusión en cuanto a su protección y uso. Para el arquitecto y urbanista Fernando Prado, el cordón ecológico no es urbanizable en ningún caso ya que está amparado por leyes y planes nacionales, departamentales y municipales. “En condiciones “normales”, ningún estrado judicial debería autorizar la urbanización de estos predios. La preservación de esta área es crucial para la salud ambiental y la calidad de vida de los ciudadanos”, asegura Prado.

Señala que según la Constitución Política del Estado (CPE) y las leyes 1551 y 777, el gobierno municipal tiene la competencia exclusiva para planificar todo el territorio municipal, no solo el área urbana. Esta planificación se refleja en un Plan Territorial de Desarrollo Integral (PTDI). Tanto en el PTDI de la gobernación como en el PTDI municipal, estas áreas deberían estar claramente definidas como parque metropolitano.

Indica que las instituciones nacionales y de coordinación como el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) y  La Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques (ABT) son instituciones nacionales que legislan sobre temas específicos como asentamientos y titulación rural. Sin embargo, deben coordinar con los planes más detallados e integrales que se refieren al territorio municipal en su totalidad. Las leyes establecen que deben concordar con las políticas nacionales en su rubro, pero su participación tiene límites.

Aunque el gobierno municipal tiene la competencia para planificar el área dentro del radio urbano (o áreas homologadas al mismo), los municipios han cedido terreno ante el INRA y la ABT. Esta renuncia a sus competencias ha generado tensiones y dificultades en la protección efectiva del Parque Metropolitano del Río Piraí. El arquitecto Fernando Prado enfatiza la necesidad de recuperar y ejercer plenamente estas competencias para garantizar la preservación de este valioso espacio natural.

Por lo tanto, señala que es fundamental que las autoridades y la sociedad civil trabajen juntas para aclarar y fortalecer la estrategia de protección del Parque Metropolitano del Río Piraí, asegurando su conservación para las generaciones futuras.

“Nos encontramos al borde de un precipicio. La ignorancia de las autoridades municipales y judiciales, aliada con los voraces intereses económicos, amenaza con desmantelar la sólida estructura de la planificación urbana en Santa Cruz de la Sierra”, señala Prado. Señala que los beneficios que esta planificación ha brindado a nuestra ciudad están en peligro, y el premio mayor, el parque metropolitano de Piraí (también conocido como el cordón ecológico), está en la mira.

Afortunadamente, nuestra Constitución Política del Estado no abraza el ultraliberalismo de otras naciones. El artículo 56 establece que la propiedad privada no es ilimitada; debe cumplir una función social y no perjudicar el interés colectivo. En el ámbito rural, esto se traduce en la producción. Pero, ¿qué sucede en el área urbana? ¿Quién define la función social allí?, cuestiona el urbanista.

El Mandato Municipal y la Planificación Integral

La Constitución Política del Estado también confiere al gobierno municipal la responsabilidad de la planificación. “Sin embargo, algunos funcionarios creen erróneamente que esta tarea se limita al área urbana. La verdad es que abarca todo nuestro territorio. Es hora de reconocer la importancia de la planificación integral y de protegerla de la ignorancia y los intereses que amenazan su existencia”, asegura Prado.

Para el especialista en temas urbanísticos, la Alcaldía debe revelar qué usos están permitidos y cuáles son las características de cada zona, de manera que cada propietario sepa si va a ser expropiado, si se les va a indicar cuánto puede construir o de qué manera se va a manejar.

En este sentido, contempló que mientras ese instrumento no esté aprobado y no sea presentado al Concejo Municipal, el Cordón “está en peligro” de que cualquier autoridad comience a hacer cambios porque la población no conoce nada.

De igual manera  la abogada y activista Eliana Torrico quien se ha convertido en la voz de los árboles en Santa Cruz. Fundadora del Colectivo Árbol, considera que el Cordón Ecológico, legalmente conocido como Parque Ecológico Metropolitano Piraí, abarca la ribera del río Piraí en varios municipios del departamento de Santa Cruz. Es un núcleo principal de absorción de carbono, un refugio de biodiversidad y una barrera contra inundaciones. Sin embargo, este bosque urbano está bajo amenaza constante debido a la expansión de urbanizaciones y la deforestación.

Eliana sostiene que no es necesario ampliar la mancha urbana para que el municipio tenga competencia sobre el cordón ecológico. Las competencias concurrentes entre los tres niveles de gobierno ya existen, asegura.

Torrico informó que el plan de uso de suelo determina la preservación del cordón, garantizando actividades compatibles y únicamente con la recreación, investigación y educación. Incluso el pernocte está prohibido para evitar construcciones no autorizadas.

Leyes y Competencias

Las leyes nacionales y municipales convergen en la protección del cordón. La Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques (ABT ) tiene la obligación de proteger la servidumbre ecológica, mientras que la Gobernación puede rechazar licencias para obras en el cordón. El municipio también regula el territorio y puede paralizar proyectos.

Desafíos y DesconfianzaA pesar de estas leyes, falta voluntad para hacerlas cumplir. “Las autoridades deben coordinar y proteger el patrimonio natural sin ceder ante intereses económicos. La desconfianza en la administración pública dificulta la confianza ciudadana en una gestión eficiente de los recursos”, concluye Torrico.